El 1 de Julio de 2023 competí en el AEP 2 de Andalucía en la categoría de -83 kg. En prognosis era la primera vez que en una competición podía hacer podio, iba a ser una batalla pero mis posibilidades de entrar en el podio existían, cosa que nunca había pasado desde que empecé a competir en 2018.
Al saber que mis competencias físicas estaban al nivel entré rápidamente en zona pese a los nervios, tengo esa habilidad para callar las dudas y llevar los nervios a mi favor para concentrarme, solo necesito controlar la respiración y la música.
Calentando me notaba bien, hacía mucho calor, era Málaga y en Julio en un pabellón lleno de gente. Mis rivales también estaban bien, podía notar sus miradas y ellos la mía lógicamente. Terminamos de aproximar y comenzamos a salir a tarima, yo era el antepenúltimo en salir con 210 kg en sentadilla, todos mis rivales hicieron el opener como toca, bien y válidos. Salgo yo, la barra no me pesa en la espalda (gesto clave en mi para sentirme bien) no escucho a nadie, estoy en zona, me dan el inicio, bajo, subo, me dan la orden de Rack pienso que lo he hecho bien pero me dan el movimiento nulo 2 a 1, faltó profundidad.
De estar en zona a empezar a escuchar todo el bullicio del pabellón perdí el foco, pensé que a la mierda, otra competición lucharé el podio, pero fue mirar a Borja (Borja Fajardo, mi entrenador) que me dijo te voy a subir el peso, han salido bien, y volví a entrar en el juego, mirada de pocos amigos y a volver a dar lo que tengo.
Evita las distracciones
Cuando vas a competir en Powerlifting normalmente lo vas a hacer en un pabellón municipal donde hay de todo menos silencio. Vas a escuchar a gente gritar, otros reírse, otros hablando del fútbol o la fiesta del fin de semana, atletas gritando y bailando que parece que están en la Mae West, escuchando música, el material será diferente al de tu gimnasio, el suelo resbalará más, no es tu entorno de entrenamiento. Las distracciones van a estar por todos lados y las vas a notar más.
Nadie tiene la culpa del ruido, no están hablando de ti, ni se rien de ti, pero tus nervios te harán creer que están hablando de ti sacándome del foco, de la zona, si esto sucede es tu culpa. Tienes que evitar todas estas distracciones si quieres centrarte y rendir bien.
Las herramientas que más me ayudan a entrar en zona es la música, unos buenos cascos con cancelación de ruido a poder ser y la respiración, centrarme en como respiro, como inspiro por la nariz inflando el abdomen lentamente y lo expulso por la boca. También me ayudo previamente en el calentamiento de ir notándome fino con la técnica, replicar lo que hago entrenando, etc. Todo cuenta.
Mantener feedback negativo en su sitio
Saber controlar las críticas y las malas sensaciones es muy difícil, pueden destruirte pero también pueden ayudarte. Para implicarte en cualquier deporte debes saber que a veces las cosas no van a ir bien, debes aceptar esa parte del trato, es necesario conocer el fracaso para mejorar y saber surfear estas situaciones, la típica frase de Michael Jordan que ilustra esta idea:
“He fracasado una y otra vez en mi vida por eso he triunfado”
Feedback entrenador
Tu entrenador en estas situaciones puede ser clave, su palabra puede motivarte o puede hundirte, en mi caso cuando me dijo que le íbamos a subir el peso al segundo intento me hizo volver a entrar en el juego y estar listo. Este segundo intento lo hice válido.
El feedback puede ser desde una corrección técnica, a decirte como te ha visto, rápido, fuerte, o puede ser darte un estímulo para que centres tu atención solo en eso como por ejemplo, meterle más velocidad en la bajada por ejemplo.
También una falta de feedback puede reducir el rendimiento, puede que si no me hubiese dicho nada yo lo hubiese vuelto a intentar pero sin meterme en zona. Las palabras pueden ser un interruptor a la acción.
Mantente en el presente
Ante estas situaciones quedarte pensando en el error que has cometido puede ser trágico al igual que centrarte en los kg que le tienes que meter a los siguientes intentos para recuperar el total, no te centres en eso, centra tu atención y tu esfuerzo al siguiente intento que tienes en 5 minutos. Eso es lo que importa.
Espero que este texto os haya ayudado a tener un marco de actuación si os enfrentáis alguna vez a alguna situación como la comentada al principio del texto. En mi caso en esa competición logré quedar segundo, siendo mi primer podio en mi carrera deportiva y con el mejor total que he hecho nunca en una competición. Es muy gratificante disfrutar de todo el proceso y ver cómo se mejora año a año.
-Texto inspirado gracias al libro “Fluir en el deporte” de Mihály Csíkszentmihályi-